El café es considerado uno de los mejores exfoliantes para el cuerpo. ¿Sabes por qué?
Esto es debido primero a su textura granular, y más importante aún a su elevado contenido en antioxidantes naturales. Un win-win.
Así que además de beberlo por las mañanas, ahora también vas a poder ponértelo sobre el cuerpo. ¿Cómo? Con uno de mis métodos favoritos para exfoliar la piel.
Sí, hay muchas opciones de exfoliantes de café en las tiendas, pero a mí me gusta más hacerlo en casa. Es muy fácil y solo necesitas 3 ingredientes. ¡No tienes nada que perder!
Pero si la idea de pringarlo todo no te atrae, en este link tienes mis opciones exfoliantes favoritas.
Receta básica de exfoliante de café para el cuerpo
El café está repleto de antioxidantes, y éstos nos van a ayudar a combatir el envejecimiento prematuro al luchar contra los radicales libres.
Otra ventaja: podría ayudar a aumentar tanto el colágeno como la elastina de nuestra piel, y de esta forma tensar y reafirmar el tejido.
Por este motivo, es ideal para aplicar en las áreas donde se ha formado la celulitis o hay estrías.
Además, su textura es muy suave, y no resulta tan abrasivo como el azúcar o la sal marina.
Cuando hagas esta receta, recuerda que puedes cambiar las cantidades a tu gusto, y añadir algunas gotas de aceite esencial para darle olor rico.
Ingredientes:
- ½ taza de azúcar moreno
- 2 cucharadas de posos de café fríos
- ¼ taza de aceite de almendras dulces
Elaboración:
Reserva los posos de café cuando elabores una taza. Si utilizas café de cápsulas, abre la cápsula para acceder a los posos.
Mezcla los posos fríos con el azúcar y ve añadiendo el aceite de almendras dulces hasta que tenga una consistencia de arena de mar húmeda. Si te gusta más aceitoso, añade un poco más.
No esperes demasiado a usar este exfoliante casero, pues es probable que el azúcar se vaya disolviendo poco a poco en el líquido.
Si te gusta una textura más suave, entonces al contrario, deja que se disuelva una parte. Así no raspará tanto.
El ácido glicólico presente en la receta también te ayudará a exfoliar a modo de químico suave, como te comento en este artículo sobre los exfoliantes químicos.
Este exfoliante es el que uso yo para eliminar los granos de la espalda, junto con estos otros trucos que te recomiendo aquí.
Si este método te ha sabido a poco, prueba esta otra versión:
Con yogur y aceite de coco
En esta ocasión he añadido yogur para beneficiarme de las suaves propiedades exfoliantes de su ácido láctico; y aceite de coco, que viene de fábula para mantener la piel hidratada.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de posos de café fríos
- 1 cucharada de aceite de coco
- ¼ taza de yogur natural
- El jugo de medio limón
Elaboración:
Dado que vamos a utilizar los posos de café, es conveniente empezar preparando una cafetera. Luego, una vez haya subido el café, debemos retirarla del fuego y esperar a que se enfríe completamente.
Una vez fría, calienta ligeramente el aceite de coco unos segundos al microondas, puesto que es muy probable que se encuentre en estado sólido.
Mientras tanto, parte el limón por la mitad y exprímelo para obtener su jugo.
Luego añade todos los ingredientes en las cantidades indicadas, y mézclalo bien hasta conseguir la textura áspera y ligeramente granulosa deseada.
Esta opción también la puedes combinar con el uso de un guante exfoliante.
Con miel y cacao
Si deseas conocer otra receta de exfoliante de café casera que proporcione excelentes beneficios, añádele miel. La miel es ideal para calmar la piel, mientras que brinda un efectivo curativo útil gracias a sus beneficios antibacterianos.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de café molido
- 3 cucharadas de yogur natural
- 1 cucharada de miel
- 2 cucharadas de cacao en polvo
Elaboración:
Comenzaremos elaborando nuestro café en la cafetera italiana para obtener los posos de café molido recién hechos, y disfrutar así de todos los beneficios que nos proporcionará su elevado contenido en cafeína.
Una vez preparado, déjalo enfriar completamente.
Una vez frío, simplemente debes combinar todos los ingredientes, en las cantidades indicadas, en un cuenco o tazón pequeño, mezclando bien hasta conseguir la textura deseada.
Y si este ingrediente no te va bien, prueba estos otros ingredientes exfoliantes naturales que pueden proporcionarte otro nivel de abrasión.
Descubre también: Todas las claves para hacer un exfoliante corporal casero
Cómo usar nuestro exfoliante de café para el cuerpo
Usarlo es igual de simple que hacerlo.
El mejor momento para aplicarlo es la ducha o el baño, concretamente después, cuando la piel se encuentra todavía ligeramente humedecida, puesto que nos ayudará a extenderlo más fácilmente.
Luego, simplemente coge un poco de exfoliante de café en la palma de la mano, y masajea suavemente el cuerpo, siempre mediante masajes circulares.
Prestar especial atención a aquellas áreas que se encuentren más resecas o ásperas, como la zona de las rodillas o los codos.
También es interesante incidir sobre aquellas zonas donde ha aparecido la celullitis o las estrías.
No olvides que la cafeína naturalmente presente en los posos de café molido es una opción anticelulítica interesante, gracias a su cualidad para estimular la circulación.
Por último, recuerda que el exfoliante ayuda a preparar la piel para que el resto de productos que conforman la rutina de cuidado de la piel puedan actuar de manera mucho más efectiva, por lo que es ideal continuar con el régimen de belleza.
En este sentido, lo más recomendable es acabar con la aplicación de un aceite corporal, para aumentar la humectación, la nutrición y la hidratación. Aquí tienes algunas recomendaciones que me han gustado.
Ahora que has aprendido a hacer un exfoliante de café para el cuerpo, ¿te animas a elaborarlo por ti misma? Recuerda que, siempre que el resto de ingredientes sean suaves, podrás también aplicarlo sobre la piel del rostro.