Una crema reafirmante puede llegar a convertirse en una opción útil a la hora de reafirmar la apariencia de la piel, ayudando a que, entre otros interesantes aspectos, tienda a parecer mucho más tersa y firme. Como ya te hemos mencionado en diferentes momentos, con el paso del tiempo, la degradación natural del colágeno suele ser una de las causas más comunes para la pérdida de firmeza y tersura, lo que puede hacer que, poco a poco, la piel acabe volviéndose flácida y aparezcan otros problemas asociados típicos (como podría ser el caso de la celulitis). Si deseas probar alguna crema reafirmante que puedas aprender a hacer en casa, no te pierdas nuestra guía donde aprenderás a hacer una crema reafirmante abdomen casera, utilizando para ello únicamente ingredientes de origen cien por cien natural.
A medida que vamos cumpliendo años es normal que algunos de los principales signos del envejecimiento empiecen a aparecer. El colágeno, por ejemplo, es considerado como una fibra esencial para la salud, apariencia y aspecto de la piel, puesto que es el encargado de proporcionar su estructura y firmeza.
De forma similar nos encontramos también con la elastina, que es un elemento igualmente imprescindible que, en esta ocasión, tiende a proporcionar elasticidad a la piel, de manera que es particularmente útil a la hora de conseguir que la piel se estire sin generar daños o lesiones, y que, posteriormente, vuelva a su lugar cuando ya no es necesario (por ejemplo, ante una pérdida de volumen o de peso).
Sin embargo, tanto el colágeno como la elastina son dos elementos producidos naturalmente por nuestro cuerpo, cuya producción se ralentiza y degrada poco a poco a medida que vamos envejeciendo.
En lo que al colágeno se refiere, por ejemplo, muchos expertos coinciden en señalar que es a partir de los 25 años de edad cuando la producción de colágeno tiende a ralentizarse en torno a un 1 por ciento anual, por lo que, aunque en un principio es normal no ver algunas de sus primeras señales, no es hasta pasados unos años cuando empezamos a ver las primeras arrugas y otros signos o síntomas asociados.
Por suerte, una crema reafirmante puede convertirse en una opción interesante a la hora de conseguir reafirmar la piel mediante fórmuladas basadas en ingredientes activos que sí han demostrado ser eficaces en este sentido.
Esto es debido a que, este tipo de cremas, ayudan a mejorar la producción tanto del colágeno como de la elastina presentes en la piel, y así mejorar tanto la tonicidad como la tersura cutáneas.
Gracias a esta formulación tan especial, se consigue alentar al cuerpo a producir una mayor cantidad de colágeno, sobre todo de manera más eficiente y eficaz, por lo que su uso regular es especialmente importante a partir de los 40-45 años de edad, ya que a partir de los 50 años de edad lo más común es que el cuerpo no produzca nuevo colágeno, y que, incluso, el único colágeno que quede presente termine por descomponerse, fragmentarse y debilitarse.
De ahí que, si tenemos en cuenta que el colágeno es el componente de la piel que proporciona estructura, es evidente que, a la hora de prevenir o tratar la flacidez de la piel (directamente causada por la falta de colágeno y elastina), es importantísimo optar por ingredientes activos que ayuden a la estimulación de la producción de colágeno y elastina.
Es más, aunque es evidente que nunca nos encontraremos con una opción de tratamiento, o con una crema, que pueda proporcionar un efecto milagroso, sí pueden ser de cierta ayuda a la hora de conseguir tensar la piel, al menos un poco, reduciendo al máximo los síntomas comúnmente asociados a la piel flácida.
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Cómo hacer una crema reafirmante para el abdomen casera: receta básica
Aunque es cierto que podemos elaborar, como veremos, infinidad de recetas distintas a la hora de hacer una crema reafirmante casera, en esta ocasión te proponemos una receta básica útil para la preparación de una crema con cualidades reafirmantes ideal para el abdomen. ¿Te animas a conocerla y elaborarla con nosotros?
Ingredientes:
- ½ taza de aceite de aguacate
- ¼ taza de aceite de semilla de uva
- ¼ taza de aceite de almendras
- ¼ taza de aceite de semilla de rosa mosqueta
- 2 cucharadas de bolitas de cera de abejas
- 20 gotas de aceite de vitamina E
- 30 gotas de aceite de extracto de semilla de pomelo
- 60 gotas de aceite esencial de pachulí
Elaboración:
Comenzaremos colocando un poco de agua en el fondo de una cacerola grande, y procedemos a colocarla en el fuego.
Añadimos en primer lugar el aceite de aguacate, el aceite de almendras, el aceite de semilla de rosa mosqueta, el aceite de semilla de uva y las bolitas de cera de abejas en un recipiente resistente al calor, que deberemos colocar luego en el centro de la cacerola con agua. Calentamos a fuego medio.
Es conveniente calentar tanto los aceites vegetales como la cera de abejas entre 15 a 30 minutos, removiendo de forma ocasional con la ayuda de una espátula, hasta que la cera se haya derretido por completo.
Una vez que la cera se haya derretido por completo, retiramos con cuidado la cacerola del fuego, y dejamos que se enfríe entre 2 a 3 minutos.
Justo cuando se haya enfriado añadimos el extracto de semilla de pomelo, el aceite de vitamina E y los aceites esenciales, y volvemos a mezclar con la ayuda de una espátula.
Ahora, con la ayuda de un embudo, vertemos el contenido con cuidado en los distintos recipientes de vidrio. Una vez que se hayan llenado por completo, colocamos la tapa en los recipientes, y dejamos que el frasco continúe enfriándose a temperatura ambiente.
Para terminar, guardamos en la nevera, donde esta crema adquirirá la textura necesaria.
Crema corporal reafirmante casera
Si deseas ir un poco más allá, y además de aprender a preparar una crema reafirmante ideal para el abdomen, prefieres optar por otra preparación óptima incluso para aplicar en el resto del cuerpo, te proponemos ahora una receta de crema corporal reafirmante casera, repleta únicamente de ingredientes cien por cien naturales.
Ingredientes:
- 50 g de manteca de mango
- 50 g de manteca de karité
- 5 g de aceite de semilla de cáñamo
- 5 gotas de aceite esencial de pachulí
- 5 gotas de aceite de vitamina E
- 5 gotas de aceite esencial de geranio
Elaboración:
Comenzaremos poniendo en una cacerola al fuego un poco de agua. Y, en el interior, colocamos un recipiente resistente al calor donde añadiremos la manteca de mango, calentando a fuego medio hasta que se haya derretido por completo.
Con cuidado de no quemarnos retiramos del fuego, y añadimos la manteca de karité. Ahora, procedemos a batir y mezclar ambos ingredientes, dejando que la manteca de karité se derrita por completo (si lo deseas, incluso, puedes optar por volver a colocar el recipiente al baño maría durante algunos segundos), pero sin sobrecalentarla más.
Una vez derretidos ambos ingredientes, volvemos a retirar del fuego y dejamos que la mezcla se enfríe. Cuando se haya enfriado, añadimos el aceite de vitamina E y el aceite de semilla de cáñamo y batimos con la ayuda de la batidora de manos.
Es conveniente proceder a batir la mezcla suavemente, hasta conseguir una combinación más bien cremosa. Eso sí, para conseguir la textura ideal, es conveniente repetir el proceso algunas veces más.
Esto significa que es necesario batir durante algunos minutos, y reservar la mezcla en la nevera durante al menos 2-3 minutos. Luego, volvemos a batir durante algunos minutos más, y volvemos a colocar en la nevera durante otros 2-3 minutos.
Ahora, procedemos a añadir los aceites esenciales, y volvemos a batir nuevamente. Así hasta conseguir una crema batida, la cual debe tener un aspecto brillante. Para terminar, introducimos en un recipiente de cristal, y la conservamos en nevera hasta su uso.
Eso sí, es conveniente prestar atención a algo fundamental: no debemos sobrecalentar la manteca de karité, puesto que podemos correr el riesgo de que se convierta en unos incómodos gránulos para nada suaves, que pueden, además, acabar arruinando la textura de nuestra crema.
Por tanto, recuerda que es fundamental que, una vez hayamos añadido la manteca de karité (no olvides, fuera del fuego), es importantísimo batirla y, en caso de ser necesario, volverla a colocar en el fuego solo unos pocos segundos, para que adquiera un poco de calor y así poder batirla completamente.
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Cómo usar nuestra crema reafirmante casera
Lo cierto es que el uso de esta crema reafirmante elaborada en casa poco difiere del resto de cremas reafirmantes corporales que podemos encontrar en las tiendas. Al menos en lo que a su uso y aplicación se refiere.
No en vano, tan solo debemos aplicarla sobre el área a tratar, aplicando mediante suaves masajes circulares, hasta su completa y total absorción, siendo aconsejable administrarla varias veces al día para conseguir los mejores resultados.
Y es que, en lo que a la crema reafirmante abdomen casera se refiere, no hay duda que, como ocurre con el resto de opciones que podemos encontrar en el mercado, la clave está en ser constantes en su uso.
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